“Es difícil encontrar las palabras para describir mi experiencia en el IAB, pero vamos a ello…
Recuerdo perfectamente mi primer día. La escuela era totalmente nueva y eso era algo que se podía ver. Las salas que hay ahora, en aquél entonces no existían al igual que el teatro. Cuando vi la escuela por primera vez aún la estaban construyendo. Recuerdo hablar con el director, el cual me enseñó la escuela y me habló de lo que sería una vez empezadas las clases. Recuerdo que sentía que estaba soñando cuando escuchaba al director explicarme cómo serían las clases, los profesores… para mí era un sueño. Jamás me imaginé acabar estudiando en un sitio así, delante del mar y rodeada de gente tan apasionada como yo.
A veces me sigo diciendo a mí misma que tengo mucha suerte de poder estar haciendo lo que me gusta en un sitio como el IAB. Si miro hacia atrás, veo a una chica con ganas descontrolábles de actuar, pero sin saber bien cómo hacerlo. Creo que el haber trabajado siempre con gente no solo de aquí, sino también de fuera, me ha hecho ver que no hay solo una forma de trabajar, sino muchas, y que de todas ellas ahora soy capaz de poder elegir cual es la mejor para mí.
El primer año fue algo difícil para la escuela y por lo tanto para nosotros también, ya que aún habían cosas que probar y mejorar y nosotros los alumnos teníamos que adaptarnos a ciertos cambios. Aun así, para mí fue una experiencia única. Aprendimos a adaptarnos y a sacar lo mejor de nosotros. Desde el primer año hasta ahora he podido tener como profesores a gente increíblemente talentosa. Gente que siempre ha apostado por mí y que me ha hecho creer en mi trabajo, lo cual creo que es imprescindible para cualquier persona. Este último año nos están preparando para el “mundo real” o “mundo profesional” y me siento agradecida de poder contar con toda la ayuda que nos están dando.
Creo que lo más bonito que me ha pasado en el IAB y que no cambiaría por nada ha sido conocer a personas que me han ayudado a ser la actriz que soy ahora. Esas personas son mis compañeros de clase. Compartir cuatro años de experiencias con el mismo grupo de personas y sobre todo compartir experiencias como actores, lo cual nos ha empujado a conectar más instintivamente, nos ha cambiado no solo como actores sino sobre todo como personas.
Me es difícil el visualizarme después del IAB, creo que, aunque me vaya mentalizando de que ya se acaba una parte de mi aún no se lo cree. Espero que todos nosotros consigamos nuestros propósitos, y si no, al menos podremos haber dicho que hemos sido la primera generación del IAB.”
By Zary Santino
BA (Hons) Acting
Spain
